Sales sus colores y usos esotericos

SAL AZUL

Tambien llamada “Flor de Tolbache”. Es ingridor y amansador. La sal azúl de Tolbache se usa en baños, riegos y puesto directamente al cuerpo de la persona indicada que se quiere “curar”.

SAL ROJA

También llamada “Flor de la Pasión”. Se usa regada directamente al piso donde se tenga que transitar o donde se pare la persona que quieres que sea tu Amor Pasional. Puede usarse también disuelta en agua para rociarla por donde tenga que pasar la persona que quieres.

SAL ROSA

También llamada Flor de Amor. Se usa regada directamente al piso por donde tenga que pasar o donde se pare la persona amada. Puede usarse también disuelta en agua.

SAL NEGRA

Para retirar malos vecinos. Se riega esta sal en la puerta del o los vecinos que se quieren alejar, junto con 3 papelitos en los cuales se debe escribir lo siguiente:

1- “Nombre completo, cada día que pases aquí será tu desgracia.”
2- “Retírate y vete lejos, para librarte de la Sal negra.”
3- “Solo que te vayas muy lejos de aquí, te librarás de la Sal Negra

SAL AMARILLA

También llamada “Flor de los Difuntos”. Se usa para la destrucción de los enemigos. En la región Vudú, se les pone esta sal en una Jicara de Agua a los zombies difuntos durante 7 noches, bajo unas ramas o plantas de Helecho Macho, para que ayuden a la destrucción de un enemigo o enemiga para que a determinada persona le caiga la Maldición del Mal Amarillo (secarse en vida).

SAL VERDE

También llamada “No me olvides”. Si deseas que el ser amado jamás te olvide y que tu recuerdo en él sea siempre firme y legal, pon esta Sal en el Agua para darte un baño íntimo, externo. Luego, regar con ese agua el piso por donde tenga que pasar dicha persona y jamás podrá olvidarte.

SAL VIOLETA

Dominadora. tu hombre estará siempre muy conforme contigo en todo y por todo. Nada te reclamara jamás, ni se celará, ni tratará de acecharte, jamás creeraá chismes sobre tu persona, sólo creerá lo que tu quieres que crea. Se pone esta sal en suficiente agua caliente para bañarse, mojarse y frotar todo el cuerpo. Después enjabonar y enjuagar bien con jabón santificado. Posteriormente, se guarda un poco de ese agua para regar o tirar en el piso por donde tu hombre tiene que pisar para dominarlo.